El 15 de Agosto de 2006, por primera vez en la historia holandesa, un auto de Fórmula 1 circuló sobre una autopista. El piloto del equipo Red Bull Racing, Robert Doornbos, alcanzó una velocidad de 326 kilómetros por hora en el canal A7 que fuera cerrado especialmente para esta exhibición en “De Afsluitdijk”.
La tranquilidad de esa mañana fue interrumpida por el sonido de un Fórmula. En aquel momento, sobre el A7 que estaba cerrado para este acontecimiento, el sueño de la niñez del piloto de Fórmula 1 Robert Doornbos se hizo la realidad. Doornbos dijo: “¡Esto es fantástico! Naturalmente yo a menudo conducía mi coche de pasajeros por De Afsluitdijk, pero nunca tan rápido como hoy en mi Fórmula 1...
El último Gran Premio holandés se celebró en 1985, y desde entonces ese país espera el momento de recuperar semejante espectáculo. Esta exhibición fue un juguete para mantener viva la esperanza.