Las superficies fueron despejadas de discontinuidades formales, las ventilaciones laterales se redujeron en tamaño y fueron refinadas con muy buen criterio. Se diseñaron nuevas llantas, más elegantes que las anteriores. En el capó se agregó una toma de aire muy refinada (para los motores de bloque grande), decorada con una flecha de color que llegaba hasta la punta del capó.
El Corvette 1967 presentaba 7 opciones distintas de motorización, comenzando desde un V8 bloque pequeño de 5.300 cm3 y 300 HP hasta el poderosísimo L-88 427, un V8 de 7.000 cm3 de 435 caballos de potencia. Éste último, es el más buscado por los coleccionistas.
En el interior lucía cuero bien trabajado, freno de mano ubicado en la consola central e instrumental deportivo. Hoy en día, es considerado uno de los modelos más importantes en toda la historia de los Corvette.
© Adrián Blanco 2005 – Prohibida la reproducción total o parcial sin consentimiento explícito del autor.