El próximo Chrysler 300C SRT-8 que llegará al Mercado a mediados de 2005. Presenta como principal argumento de ventas un motor V8 HEMI de 6100 cm3 optimizado para generar 425 caballos de potencia (casi 70 hp por litro). Esto supera al afamado HEMI de la década del 60, siendo en el motor más poderoso que Chrysler ha vendido, exceptuando deportivos de alto rendimiento como el Dodge Viper.
El motor del 300C SRT-8 fue llevado de 5700 a 6100 cm3. La relación de compresión también aumentó, de 9,6:1 a 10,3:1 para mejorar el proceso de combustión. Según pruebas realizadas durante 2004, alcanzaría los 100 km/h con partida detenida en 5 segundos aproximadamente y el cuarto de milla en menos de 14 segundos, prestaciones confrontables con las de cualquier auto deportivo.
Los motores HEMI obtienen su nombre por su diseño, su cabeza de cilindro es hemisférica para mayor eficiencia en la combustión. Este concepto nació en la década del 50 y para los 70s los autos con motor HEMI hacían furor por sus prestaciones excepcionales.
Para adaptar el resto del auto a los cambios del motor, el notable incremento de potencia y el crecimiento de los esfuerzos a los que se somete al chasis, los ingenieros recalibraron el Programa Electrónico de Estabilidad (ESP).
Las barras anti-rolido fueron sustituídas por otras de mayor diámetro. Los amortiguadores han sido recalibrados y los recorridos de los resortes readaptados. A esto se agrega que el auto ahora circula 3,8 cms más cerca del suelo. Se mejoró así la maniobrabilidad y la estabilidad a altas velocidades.
La carrocería presenta cambios en la sección frontal, básicamente en la canalización del flujo de aire para dirigirlo mejor hacia el radiador y por ductos laterales para refrigerar los frenos.
Se diseñó un spoiler trasero muy refinado que apenas se destaca en la tapa del baúl. No sólo es un detalle ornamental sino también funcional, agregando un 40 por ciento de fuerza descendente sin incrementar el arrastre. Nuevos detalles disponibles son manijas, espejos retrovisores y parrilla de igual color que la carrocería.
Los estilistas de Chrysler se esforzaron para expresar toda la performance del 300C SRT-8 en sus líneas. Con rasgos presentes en todos los modelos en plaza de la compañía, la intención es cambiar la imagen que los clientes tienen de Chrysler.
Hasta hace diez o tan sólo cinco años, esta compañía solo era asociada con vehículos de gama media para usuarios de autos sedán de uso diario. Sus concepciones y criterios de diseño, sin importar los gustos personales, proponen un nuevo estilo de diseño americano. En busca de una nueva imagen que genere crecimiento en el mercado, asumen el riesgo de cambiar la tendencia de sus vehículos anteriores.
© Adrián Blanco 2004 – Prohibida la reproducción total o parcial de texto y/o imágenes sin consentimiento explícito por escrito del autor.